04/26/2010
«Sólo tienes que parar a mirar y de golpe las fotos empiezan a sonar», afirma Silvio Rodríguez
NÚRIA MARTORELL
BARCELONA
Juan Miguel Morales, el fotógrafo de los cantautores, «es capaz de encontrar el alma del personaje en cada retrato». Esto es lo que opina Darío Olaortua, el director de la galería Setba de Barcelona, que del 4 de mayo al 27 de junio acogerá la exposición Cuba, cuéntamelo con música. Un total de 26 imágenes de la flor y nata de la música cubana, firmadas por el único que ha conseguido que posaran para él artistas de la talla de Compay Segundo, Omara Portuondo, Chucho Valdés, Elíades Ochoa, Esther Borja y Silvio Rodríguez , entre otros.
«Es un homenaje a Cuba a través de su música popular, lo que significa que también se está contando la historia de esta tierra, con una amplia mirada a sus diferentes géneros», explica el mismo Morales (Almería, 1967). Todas las instantáneas son en blanco y negro porque, dice, le parecen «más sugerentes, fuera de tiempo». «Soy un enamorado de la foto documentalista clásica», admite el responsable de memorables portadas de discos de Lluís Llach y Maria del Mar Bonet, que vive en Cataluña desde 1982.
Morales recuerda que «la producción» de esta exposición «fue bastante larga». «Antes de ir a Cuba en 2003 y captar las primeras imágenes, estuve meses estudiando el tema con expertos y hablando con cantautores como Vicente Feliu. Y cuando aterricé, me encontré con mi alma gemela en La Habana, Iván Soca, que trabaja el tema de la trova desde hace años y me consiguió muchos contactos-recuerda-. Tanto a él como Feliu los emocionaba mi proyecto ».
Feliu le ayudó a ir a la Casa de la Música de La Habana y le presentó «gente clave como Augusto Blanca, otro gran trovador», que le proporcionó aún más teléfonos. «Venía con su mirada transparente con la idea de llevarse imágenes de músicos cubanos. Estableció su estado mayor entre mi casa y la de Iván Soca, y salió a cazar caras, guitarras, viejos, jóvenes ..., captando más allá de la lente, penetrando en los diversos mundos de sus retratados. Ha creado un conducto directo entre su pupila y su corazón », afirma por teléfono Augusto Blanca, autor de imborrables canciones como No olvides que una vez fuiste sol.
Cuando Morales finalmente conoció a su "admirado" Silvio Rodríguez, éste le dijo que «tenía muy buenos padrinos en Cuba», explica el fotógrafo, porque ya había oído hablar de él. Y ahora el compositor del Unicornio no escatima en halagos: «Su mirada no es leve. Son retratos que explican. Sólo tienes que parar a mirar y de golpe las fotos empiezan a sonar ».
Morales compartió conocimientos con grandes de la fotografía en Cuba como Liborio Noval y Félix Arencibia, «el gran maestro, ya fallecido». Y pudo hacer «una exposición previa con parte de este material en la misma Habana, en 2007 a la entrada del teatro Amadeo Roldán. Y un año después, el Karl Marx, auspiciado por el Festival Barnasants.
CHARLA CON COMPAY/Morales es incapaz de decidir cuál fue el momento más emotivo. «Aprender tanto de cada uno de ellos y entrar en sus mundos todo un día de sesión me dejaba con la adrenalina muy alta. Cada encuentro era como un máster de la historia cubana ». A Compay Segundo le visitó en 2003 al estudio de grabación Abdala. «Pasamos al jardín, nos pusimos charlar y le hice este retrato. Fue su última sesión antes de morir».
Rememora con afecto la visita a la casa de Esther Borja. «Me habló de Bola de Nieve y de Lecuona, que tantos éxitos le proporcionó. Y se quiso retratar con una foto que tenía con él ». Y no se quiere olvidar de Richard Egües (ya fallecido), «flautista de La Orquesta Aragón, autor de El bodegueros y revolucionario del cha-cha-cha». Morales subraya que todos los retratados son artistas de primera fila, si bien sabe que hay ausencias. «Intentar abarcar la música cubana es imposible, sería como abrazar el mar".
Algunas fotos:
COMPAY SEGUNDO. "Creo que a Segundo le hice su última sesión fotográfica antes de morir".
TATA GÜINES. "El gran percusionista y aristócrata de la rumba, ya fallecido, me impresionó por la mirada, personalidad y largas uñas. Creó precedente: con él hubo un antes y un después".
MUÑEQUITOS DE Matanzas. "Fui hasta el local de ensayos que tienen en Matanzas. Son toda una institución de la música afrocubana que se renueva generación tras generación"
LA EXPOSICIÓN INCLUIRÁ VARIOS ACTOS RELACIONADOS CON CUBA Y SU MÚSICA.
Y LOS ÚLTIMOS 15 DÍAS LA MUESTRA INCLUIRÁ UNA COLECCIÓN DE 12 FOTOS DE MARU, MI MADRE. "12 IMÁGENES DE MARU".
